FUNNY PEOPLE



Judd Apatow ha estado asociado de alguna u otra manera con la inmensa mayoría de las comedias gringas de los últimos años. Como director, guionista, productor o por simple influencia, ha provocado un oleada de estrenos basados en historias que mezclan humor conversacional tosco, aunque bastante ingenioso, con lo que los gringos, sin sonrojarse, llaman corazón. Son películas muy convencionales, provistas de fuertes recados moralizantes pero que por momentos logran verse o más bien escucharse, frescas y efectivas. “Funny People” es recién su tercera película como director, luego de “Virgen a los cuarenta” y “Ligeramente embarazada” y a pesar de sus innumerables problemas, es una apuesta que marca un salto cualitativo en su filmografía por un despliegue de ambición pocas veces visto en el pleno Hollywood actual.
George Simmons (Adam Sandler) es un exitoso actor de comedias idiotas similares a la filmografía de los hermanos Wayans, es básicamente un millonario egoísta que vive como el cliché de los millonarios egoístas hasta que le es diagnosticado un cáncer grave. Ira Wright (Seth Roguen) es un aspirante a humorista -para los gringos no existe otra cosa más que el stand up- que provisoriamente vive de allegado en el departamento de dos colegas relativamente exitosos. Las vidas de ambos se unen cuando George decide volver a los escenarios y luego de ver a Ira en un club, lo contrata como asistente personal y escritor de material. Hasta aquí tenemos la base de la clásica por no decir horriblemente repetida historia del millonario egoísta que luego de una enfermedad terminal o algo parecido, descubre que es lo realmente importante en la vida. La verdad es que incluso en esta temprana etapa de la película, ya hay diferencias sustanciales con la formula. En primer lugar el personaje de Sandler es realmente desagradable; no desagradable atractivo como House o el profesor Snape de Harry Potter, si no que es un tipo que uno quiere dejar de ver lo antes posible. Ira, con el que deberíamos empatizar por descarte, tampoco es el faro moral que tendría que ser; para conseguir el trabajo con George traiciona a su colega que le cae mejor. Volviendo a la formula, llega el momento en que el millonario egoísta es liberado de la enfermedad y queda listo para una vida nueva y mejorada. En un principio parece que vamos para allá. George perdió al amor de su vida, Laura (Leslie Mann), por una o varias noches de infidelidad; es obvio que es el momento de intentar recuperarla pero sucede que Laura está casada y no tan disponible. Aunque su matrimono está lejos de ser perfecto, demuestra ser mucho más estable de lo esperado. Esto significa que para que George se quede con Laura tiene que destruir no sólo un matrimonio, si no que a una familia, que además de la pareja incluye dos hijas muy tiernas y un perro. Aquí es cuando empiezan a surgir los problemas estructurales en Funny People, es muy cierto que la película se divide y parece que estuviéramos viendo algo más, pero no se puede negar lo original de la propuesta. Apatow nos muestra la familia con paciencia; quizás mucha, mucha paciencia, pero así entendemos que van a haber consecuencias si es que George recupera a Laura.
Es todo lo que voy a contar; Funny people es sobre un millonario egoísta que después de vivir una experiencia cercana a la muerte, se transforma en un millonario probablemente un poco más egoísta.
Insisto, la cantidad de problemas dramáticos, temáticos y estructurales es muy frustrante, pero Apatow da admirables señales de que está lejos de conformarse con su éxito.

El link donde siempre

MOON



Después de desilusionarme de muchas películas de las que pensaba escribir, por fin tuve el privilegio de ver algo que vale la pena; y mucho.
Moon es la opera prima del hijo de David Bowie, creo que es una apuesta muy segura afirmar que el director Duncan Jones obtuvo algo de inspiración revisando la carrera de su padre.
A lo largo de la historia de la ciencia ficción muchas películas, novelas, cuentos y canciones como space oddity de Bowie, han trabajado sobre ideas muy similares. Básicamente este género habla del alcance de la tecnología y sus consecuencias; sobre los límites de nuestra intervención en el universo avalados con la excusa de hacer nuestras vidas más sencillas.
Es muy difícil escribir sobre esta película sin revelar misterios esenciales de la historia. Voy a ser lo más discreto posible. Sam Bell, un enorme Sam Rockwell, es el único empleado a cargo de una estación lunar dedicada a recolectar energía limpia y enviarla a la tierra. Le restan sólo días para los tres años que marcan el fin de su contrato y el vuelo de regreso a casa. En su base lunar Sam vive totalmente aislado del contacto humano aunque disfruta de la compañía de Gerty, la computadora (o el computador) central cuya voz se parece mucho a la de Kevin Spacey.
Las comparaciones con HAL de “2001” de Kubrick son evidentes y algo injustas; la verdad es que casi cualquier película al lado de Kubrick parece idiota y muy poco seria. A medida que avanza la historia estuve todo el tiempo esperando el momento en que Gerty iba a experimentar el cambio de absolutamente servicial a violentamente existencial. No voy a revelar que es lo que pasa en definitiva pero debo decir que Jones está muy consciente de la comparación.
El dato más importante sobre Sam es que se trata de un hombre casado y con una hija; los tres años de separación no han hecho más que intensificar su amor por ellas. A esta fuerte añoranza debemos el poético plano de Sam a bordo de su jeep lunar mirando con nostalgia a un tranquilo planeta azul. Sin entrar en específicos, Moon recorre los caminos ideológicos visitados antes por películas como Blade Runner, Inteligencia Artificial o Yo Robot. Desde el momento en que somos capaces de crear vida surge una problemática inevitable; sea como sea, la nueva vida es necesariamente inferior, son ciudadanos de segunda clase, son nuestros para hacer y deshacer. Moon advierte; si algo respira, piensa y sobre todo ama ¿En qué se diferencia de nosotros?


Ahora está el link para la versión en inglés


Observe and Report fue la segunda película que comenté desde el lejano día en que escribí la resolución que establece la forma definitiva de este blog. Después de tan cuantioso trabajo que cumplió con creces la configuración de un sólido formato, creo que me gané el derecho de inaugurar una sección ocasional para no ser tan repetitivo.
Bestia negra: Persona o rival muy difícil de batir, que inflige contundentes derrotas a un mismo adversario en distintos enfrentamientos.
Este es el nombre de la sección y para el primer caso elegí una película muy vieja, del siglo pasado incluso, llamada American Beauty.



Esta es mi bestia negra definitiva. No porque sea enigmática como “2001 odisea del espacio”, demasiado personal como “Synecdoque, New york” o derechamente incoherente como “Inland Empire”, si no porque es por mucho la película con la que he disfrutado la mayor cantidad de prolongados y acalorados debates. Horas y horas de discusiones con todo tipo de interlocutores, pasando por todas las interpretaciones concebibles y una que otra inconcebible. El problema se origina principalmente debido a una razonable y creo muy popular afirmación, Belleza Americana es una película subversiva.
Lester (Kevin Spacey) es un hombre derrotado por una vida que no lo satisface de ninguna manera. No cuenta con el respeto de nadie a su alrededor; tanto su esposa, su hija y sobre todo él, están hartos del patético ser humano en que Lester se ha convertido. El día de la salvación llega cuando asiste a la presentación del equipo de porristas de su hija y conoce a su atractiva compañera llamada Angela (Mena Suvari). El deseo que esta joven le despierta, le dan la fuerza necesaria para iniciar una solitaria rebeldía suburbana. Podríamos decir que es la historia de alguien que subvierte un modelo de vida, que en estricto rigor es el adecuado en función de una sociedad en particular (tristemente parecida a la nuestra). Lester es un hombre que ya no se va a conformar, que está dispuesto a hacer algo. Renuncia a un trabajo irritante pero respetable, chantajea a su jefe en el camino y se dedica a mejorar su cuerpo con el sueño de convertirse en un exitoso pedófilo. Subversión pura.
El termino que muchas sinopsis ocupan para describir la línea narrativa de Lester es “Crisis de la mediana edad”. Después de investigar un poco sobre el tema, es una calificación adecuada y que delata el punto de vista. La definición indica que se trata del delirante intento por volver a una edad más temprana, hasta un momento en su vida en que las posibilidades eran infinitas y las responsabilidades limitadas. En pocas palabras una etapa en que la inmadurez era justificada. Esto revierte la afirmación porque define su rebeldía como una simple pataleta. Es la historia de un hombre que se cansa de la vida de adulto y sencillamente quiere pasarla bien.
Avanzado el metraje, Lester conoce a su joven vecino Ricky (Will Bentley), un introvertido o más bien excéntrico joven voyerista y vendedor de marihuana. Ricky posee una cámara con la que graba la vida a su alrededor. Para él vivimos en un mundo rodeado de una belleza tan cotidiana que nunca nos detenemos a observarla. De aquí nace el famoso plano de la bolsa volando por el viento. Ricky se convierte en el dealer de Lester y en una incorpórea fuente de sabiduría; voy a volver a esto más adelante.
Durante el clímax Lester se encuentra con la oportunidad real de tener sexo con Angela. La joven está totalmente entregada y Lester muy dispuesto hasta que su objeto de deseo le revela su virginidad. Voy a omitir mi opinión sobre la definición de este conflicto porque lo que realmente importa es la epifanía a la que Lester accede. Su actitud es de absoluta plenitud, finalmente se ha dado cuenta de lo afortunado que es; su vida ha estado siempre colmada de dicha, el problema es que él no la veía.
Hay gente que define la perfecta madurez como la ausencia de egoísmo, un estado de total entrega. Personalmente creo que hay una enorme diferencia entre entrega y conformismo. Con esta discrepancia conceptual se resume la pugna ideológica que Belleza Americana ha despertado en mi reducido círculo.
Según mi punto de vista la progresión es la siguiente: Lester es un inconformista pasivo que pasa a ser inconformista activo aunque un poco perdido, hasta que se consolida simplemente como un conformista. Según “Ellos” la progresión sería; un inmaduro viviendo una vida de adulto que retrocede a una etapa de rebeldía juvenil, hasta que se consolida como un hombre totalmente maduro.
Cuando Ricky le muestra el video de la bolsa a la hija de Lester, menciona que el mundo está tan lleno de belleza que su corazón sufre una sobrecarga de emoción. Estas mismas palabras son pronunciadas por Lester en su monologo post mortem a pesar de que Ricky nunca se las dijo. Lester ocupa esta enseñanza como argumento para justificar su aprecio por cada momento de su pequeña y patética vida. Juzguen ustedes.

Como siempre, para acceder al torrent hagan click en el título.

OBSERVE AND REPORT



Observe and report es otra víctima del espionaje industrial en Hollywood. Varias veces hemos visto como dos películas con premisas prácticamente iguales son estrenadas en la misma temporada. Impacto profundo y Armageddon; Hormiguitaz y Bichos; Robin Hood y Robin Hood, por poner algunos ejemplos. En el caso que nos convoca, la otra película se llama Mall Cop, un mamarracho pensado para el gringo cliché. Es obvio que nunca se trata exactamente de lo mismo pero bajo una mirada con relativa superficialidad no hay diferencias significativas. Esto no podría ser menos cierto con Observe and report versus su horrible hermanita. De hecho, completamente opuestas es una definición bastante apropiada.
Ronnie Barnhardt (Seth Rogen) es el jefe de seguridad de un mall con pinta de californiano. En un principio se ve como un tipo quizás demasiado comprometido con su trabajo pero nada del otro mundo. A medida que avanza la historia, Barnhardt se revela como un bipolar bajo medicación con una restringida percepción de la realidad. Este personaje podría haber sido confinado a una mesura razonable pero los creadores llevan la idea hasta el límite. Es un hombre racista, fascista, idiota y obviamente peligroso. Si no fuera porque muestra cierta ingenuidad y por como trata a su madre alcohólica, estaríamos en presencia de un personaje absolutamente negativo.
La comparación con Taxi Driver es inevitable; guardando las proporciones, es un enfrentamiento de la que sale bien parada. Lo sorprendente es que es una versión cómica de la obra maestra de Scorsese. Sólo por intentar una idea así dentro una fabrica conocida por su prevención de riesgos, es una película que parte con ventaja; eso si comparten mi aprecio por este tipo de antecedentes.
Observe and report nunca cae en los recursos que incluso las comedias más subversivas hollywoodenses terminan adoptando. Cuando toma una ruta hacia lo positivo se las arregla siempre para burlarse de nuestras expectativas y oscurecer aun más a los personajes. Cada segmento habla peor del mundo en que Barnhardt existe y no sólo daña la posibilidad de redención si no que cuestiona su utilidad.
He visto bastantes películas en mi vida y me atrevo a decir que nunca algo como esto; al menos no proveniente de algo remotamente parecido a Warner Brothers. Mall cop es lo que todos esperamos de un estudio gringo; la historia de un pobre tipo que se convierte en un héroe a través de inverosímiles circunstancias y chistes inocuos. Observe and report es parecido a lo que Sam Peckinpah hubiera hecho estando más borracho de lo acostumbrado.
Su aciertos dramáticos y su efectividad cómica son perfectamente discutibles pero nadie le puede negar los inmensos cojones que ostenta durante todo el metraje. Sólo con eso se gana la recomendación aunque debo advertir que requiere de cierta perversidad o verdadero hastío a lo convencional para poder disfrutarse.

Hagan click en el título para acceder al torrent

CRITICA "IN THE LOOP"



*Alerta de estropeadores* (SPOILERS) (De ahora en adelante, asuman que los hay) (En mi propia defensa, siempre son pequeños)

Una particularidad de la serie británica “The Office” es que las características de la oficina son prácticamente irrelevantes. Sabemos que es una sucursal de una compañía que vende papeles, pero perfectamente podrían vender tazas, ladrillos o salchichas. Lo que realmente importa es el funcionamiento de la maquina y la interacción entre sus piezas. Esta distancia ideológica entre producto y administración es un dinámica clave en In the loop. La película utiliza las herramientas visuales de la serie para intentar demostrar que las altas esferas del poder son una oficina como cualquier otra, donde lo único que interesa es sacar el máximo provecho personal en cada jornada de trabajo.
El argumento es convincente, tanto que puede llegar a deprimir. En esta oficina en particular, lo que se vende es la guerra, la invasión en Irak precisamente. Cada trabajador está dispuesto a decir y hacer lo que sea con tal de vender la posición oficial que se tiene en ese momento y créanme que la posición puede revertirse totalmente en cuestión de segundos.
In the loop es una comedia al igual que su referente televisivo. He leído reseñas que la describen como una sátira pero la puesta en escena es tan efectiva, que la ilusión de realidad logra borrar las costuras que deberían delatar la exageración.
El ministro Simon Foster (Tom Hollander) comete un imperdonable error durante una entrevista televisiva, al declarar la invasión a Irak como algo “imprevisible”. Esta simple afirmación contradice todas las reglas de la política moderna que prohíben cualquier enunciado que suene minimamente categórico. El evento se convierte en un problema para quienes apoyan la guerra, una oportunidad para quienes la rechazan y una terrible catástrofe para la posición oficial del gobierno británico; “La guerra no es previsible ni imprevisible”. Foster experimenta un leve aumento de popularidad gracias a su intervención pero se transforma en una celebridad política cuando accede a una segunda entrevista; esta vez apoyando la guerra.
Si bien la película sigue principalmente a Foster y su ayudante mientras deben lidear con las consecuencias de sus distintos vaivenes ideológicos; la verdad es que la historia dispone de varios o si se quiere, ningún protagonista.
In the loop posee momentos inspirados pero sufre a ratos de su propia inteligencia. Aunque el grueso de la historia logra llegar al espectador fácilmente, la trama es muy rápida y difícil de seguir. Es del tipo de películas que en un segundo visionado pasan de ser interesantes a muy satisfactorias.
“Yo no creo eso y tu tampoco, pero es una hipocresía muy útil” esa genial línea de diálogo resume todo lo que los realizadores buscan comunicar. Son un montón de ideas que si no fueran contadas a través de una muy graciosa comedia, serían responsables de una película quizás demasiado alarmante.



*Alerta de estropeadores* (SPOILERS)

“La guerra es una droga”; pequeña y elocuente frase que da inicio a quizás la mejor película sobre la guerra de Irak hasta la fecha.
The Hurt Locker funciona como lo hace un documental expositivo; plantea y desarrolla a sus personajes valiéndose de la mera exhibición de la rutina de su peligrosa y singular vida laboral. Despojada de un discurso anti-bélico, sigue el día a día de un escuadrón antibombas en la recién conquistada Bagdad. La directora Kathryn Bigelow y su guionista, se las arreglan para evitar caer en juicios u opiniones y añaden una capa de realismo inusual en la ficción. La eliminación de un enfoque ideológico evidente permite la ilusión de una película con mayor inmediatez; de la misma forma que la cámara en mano (simplista pero no por eso menos cierto) lo hace en el aspecto visual.
El sargento William James (Jeremy Renner) es el nuevo líder de la compañía Bravo, es un hombre que exhibe coraje pero esconde algo muy cercano a una patología. Si bien en un trabajo como el suyo esta condición pueda tomarse como un talento, para los hombres que lo acompañan a diario y ponen en riesgo sus vidas, significa retar a la muerte sin ninguna provocación.
Las motivaciones de James permanecen un misterio; ¿Su nulo instinto de sobrevivencia es una consecuencia de ser tan bueno en su trabajo? o es el inverso. La película apunta a la primera teoría pero es una pregunta razonable, sobre todo al tomar en cuenta las palabras del comienzo. Si la guerra es droga, es quizás la droga más dura de todas; en consecuencia es legitimo dudar que un adicto de este tipo sea simplemente un adrenofilico. Sea como sea es un ejercicio para el espectador; Bigelow sabe muy bien que responder estas preguntas resultarían en una peor película.
The Hurt Locker es básicamente una serie de misiones de la compañía Bravo ordenadas en una progresión que tiene más que ver con la cabeza del sargento James que con la peligrosidad de las bombas a desactivar. Todas las drogas producen algún tipo de resaca y la guerra no es la excepción.
Como representante de un subgénero del cine de acción, la película evade el obligatorio villano que sube las apuestas a cada paso y dispone de un antagonista que al no tener un sólo rostro, resulta mucho más amenazante. Es preocupante pensar que hace sólo unos años, una película como esta hubiera sido considerada para el público masivo pero actualmente queda relegada a la categoría de cine artístico (que cada uno defina esa categoría como le plazca)
La mejor película del año es una valoración discutible pero es un hecho que es la mejor criticada. Reconocida además en el Festival de cine de Venecia, The Hurt Locker se instala como una segura candidata al oscar y devuelve las esperanzas a los amantes del cine de acción, en el terrible año en que Transformers 2 estuvo cerca de destruir el género.

*Esta película aun no ha sido estrenada en nuestro país pero aguarda en su buscador de torrent favorito para ser descargada ilegamente, como dios manda*

Entradas antiguas

Trailer "La Nana"